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GPS Ciudadano

¿Juntos pero no revueltos? Parte II

By 15/07/2021No Comments

Por Joao Acharán, Datavoz

Varias de las últimas encuestas publicadas en las últimas semanas, han sugerido que Sebastián Sichel sería el principal retador que enfrenta Joaquín Lavín en las primarias presidenciales del Pacto Chile Vamos. Considerando ambas candidaturas, replicaremos el ejercicio realizado para las primarias de Apruebo Dignidad (ver aquí), con el propósito de indagar en torno a las potenciales diferencias que puedan existir entre quienes se sienten interpretados por uno u otro.

Para ello, utilizaremos las mismas fuentes de datos: la encuesta CEP, publicada en abril de este año, para indagar en torno a quienes son aquellos que tienen una valoración positiva de ambos candidatos, y la encuesta Pulso Ciudadano, de la empresa Activa Research, correspondiente a la primera quincena de Junio, en la búsqueda de diferencias no solo sobre la evaluación de cada candidato, sino también sobre la intención de voto en las primarias del pacto Chile Vamos.

Valoración positiva de candidatos de Chile Vamos

La encuesta CEP evalúa el conocimiento de la ciudadanía respecto a una serie de liderazgos políticos y la evaluación de sus liderazgos con la siguiente pregunta: “¿Cuál de estas frases describe mejor su opinión sobre cada persona?”, cuyas alternativas de respuesta son: 1) Muy negativa, 2) Negativa, 3) Ni negativa ni positiva, 4) Positiva, 5) Muy positiva, 6) No conoce a la persona, 7) No sabe, 8) No contesta.

Los resultados para los candidatos de Chile Vamos aquí considerados muestran que Joaquín Lavín es sustantivamente más conocido que Sebastián Sichel (92.84% frente a 46.98%), pero la evaluación de ambos no difiere significativamente (31,26% versus 29,26%, respectivamente).

Para efectos de análisis, solo consideraremos a aquellos casos que manifestaron conocer tanto a Joaquín Lavín como a Sebastián Sichel (y que, por tanto, evaluaron a ambos candidatos, excluyendo también las respuestas No sabe o No responde). Luego se crea el siguiente indicador: 

  1. Valora positivamente a ambos candidatos (Positiva o Muy Positiva)
  2. Valora positivamente a Sichel (Positiva o Muy Positiva) y Valora neutro o negativo Lavín (Muy negativa, Negativa, Ni negativa ni positiva)
  3. Valora positivamente a Lavín (Positiva o Muy Positiva) y Valora neutro o negativo Sichel (Muy negativa, Negativa, Ni negativa ni positiva)
  4. Neutra o negativa para ambos (Muy negativa, Negativa, Ni negativa ni positiva)

En este caso, destaca que el 14.8% evalúa positivamente a ambos candidatos, el 14.97% evalúa positivamente a Lavín y tiene una evaluación neutral o negativa de Sichel, y que el 14.67% tiene una buena valoración respecto a Sichel, pero no así de Lavín.  Esto implica que del total de casos que valora positivamente a Lavín, el 49.71% tiene la misma valoración respecto Sichel, mientras que entre quienes tienen una valoración positiva por Sichel, el 50.2% también presentan dicha evaluación respecto a Lavín.

De manera exploratoria, analizamos si existen diferencias entre quienes evalúan positivamente a Joaquín Lavín y Sebastián Sichel. Estos resultados muestran diferencias significativas entre quienes evalúan positivamente a uno y no al otro candidato, cuando se trata del tramo etario e identificación política de los encuestados. En particular, tal como se observa en la tabla siguiente, entre quienes evalúan positivamente a Sichel, pero no a Lavín, predominan los mayores de 60 años (Sichel: 37.5% – Lavín: 11.7%), con diferencias que resultan significativas estadísticamente. Por otra parte, quienes evalúan positivamente a Lavín y no a Sichel, predominan porcentualmente en todos los demás tramos etarios, aun cuando estas diferencias no resultan significativas cuando se compara con el grupo de quienes valoran positivamente a Sichel y tienen una evaluación diferente de Lavín.

Además, en cuanto a la identificación política, parte importante de quienes valoran positivamente a Lavín, y no a Sichel, se identifican con el centro político (55.2%), lo que resulta casi 20 puntos porcentuales sobre la valoración positiva que tiene Sichel en ese segmento, lo que resulta significativo estadísticamente. En cambio, Sichel presenta una valoración positiva de su liderazgo que resulta solo porcentualmente más alta entre la centro-derecha, e incluso entre la izquierda y centro-izquierda.

Tabla 1 Evaluación positiva de candidatos Joaquín Lavín y Sebastián Sichel según sexo, tramo etario, macrozona, identificación política y nivel educacional

Intención de voto para elecciones primarias de Chile Vamos

Por otro lado, al igual que en el caso de la primaria de Apruebo Dignidad, tomaremos la base de datos de la encuesta Pulso Ciudadano, de Activa Research, que en su versión de la primera quincena de Junio indagó en la intención de voto para las elecciones primarias de Chile Vamos con la siguiente pregunta: “Si las elecciones de primarias presidenciales de Chile Vamos fueran este domingo ¿Por quién votarías?”. En ella, los encuestados tenían como alternativas de respuesta a los 4 candidatos de dichas primarias, como también las opciones Nulo/Blanco, No sabe y No votará. En este caso, como nuestro foco de interés se concentra en Joaquín Lavín y Sebastián Sichel, tanto las opciones de Mario Desbordes como Ignacio Briones fueron recodificadas en la categoría “Otro candidato”.

Por tanto, para efectos de indagar si cuando se trata de intención de voto persisten las diferencias encontradas cuando se observa la evaluación positiva de los personajes, se utilizan las mismas variables de cruce, para observar si persisten los aspectos antes destacados con los resultados de la encuesta CEP.

Al respecto, se pueden destacar los siguientes aspectos:

1) cuando se trata de intención de voto en primarias, no existen diferencias significativas entre Joaquín Lavín y Sebastián Sichel cuando se trata de sexo, macrozona de residencia e identificación política. Si bien, cuando se trataba de evaluación positiva, entre quienes valoraban positivamente a Lavín pero no a Sichel observa una proporción significativamente más alta de personas que se identifican con el centro político, esas diferencias no persisten cuando se trata de intención de voto;

2) al igual que con la valoración de los personajes políticos, el tramo etario sigue siendo relevante en la intención de voto. En particular, Lavín obtiene mejor rendimiento entre quienes tienen entre 30 a 44 años (32.4% frente a 19.4%) mientras que Sichel entre quienes tienen más de 60 años (19.8% frente a 6.4%). Esto da cuenta de que se mantiene la tendencia observada en la evaluación positiva de ambos personajes, donde justamente Sichel obtenía una mejor valoración entre los mayores de 60 años.

3) Finalmente, también existen diferencias significativas según nivel socio-económico, donde Lavín presenta una intención de voto que es significativamente más alta entre quienes pertenecen a segmentos socio-económicos bajos (D+E). A nivel medio y alto, predomina porcentualmente Sichel con diferencias que no alcanzan a ser significativas estadísticamente.

Tabla 2 Intención de voto en voto en primarias presidenciales de Chile Vamos, según sexo, tramo etario, nivel socio-económico, macrozona e identificación política

Conclusiones

Los resultados de este análisis permiten afirmar que, en ambos casos, cerca del 50% de quienes evalúan positivamente a uno de los dos candidatos más competitivos de la primaria de Chile Vamos, valoran de manera neutral o negativa a su contrincante y que existen diferencias significativas en las características socio-demográficas de ambos grupos, asociadas a tramo etario e identificación política. Por otro lado, en el caso de intención de voto, tanto el tramo etario como el nivel socio-económico son características que estructuran diferencias significativas entre los electores de ambos candidatos.

Cuando se trata de la edad, por tanto, destaca que se obtienen resultados consistentes tanto en lo que respecta a evaluación positiva del personaje como en intención de voto en las próximas primarias. En ambos casos, Sebastián Sichel obtiene un mejor rendimiento que su contrincante entre quienes tienen más de 60 años. Lavín, por otro lado, presenta una mejor valoración en todos los tramos etarios restantes, con diferencias porcentuales que no resultan significativas, y una intención de voto significativamente más alta entre quienes tienen 30 a 44 años, en relación a los partidarios de Sichel del mismo tramo etario. Además, Lavín se muestra como un candidato capaz de concitar mayor respaldo electoral entre los segmentos socio-económicos bajos.

Finalmente, destacar que con Lavín se puede observar claramente la diferencia entre evaluación positiva de un personaje político con adhesión política o intención de voto: mientras quienes valoran positivamente su liderazgo (y no el de Sichel) se identifican con el “centro político” (55.2%), su intención de voto en dicho sector llega solo al 7.5%.

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